Una hoja en blanco
yace junto
a mi alma vacía,
hay tanto para decir
y sin embargo tu voz ausente
me susurra
y no me dice nada,
ni siquiera
esas simples palabras
que uno siempre imaginó
saliendo de tus labios
rozándome.
Entonces lleno el alma
de almohadones
y pienso que te quiero
pero me siento tan solo
todavía.
Es que tienes tantas emociones
apretadas
que si un día, alguna vez,
te escaparas
de esta realidad
tan descorazonada
serías realmente feliz.
Oh si,
el alma
es una simple pantalla
que nos permite ver
un poco mas allá
del límite
de nuestra propia mentira.
so0lo diré muy bueno!!
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