viernes, 27 de mayo de 2011

Soñar lo que no sabemos (la reencarnación de los pobres) - gatoconbotas


Yo que creí saber el todo porque abracé
a la humanidad en sus mil batallas
pero en realidad mucho o poco tardé
en descubrir que nada se ni nada alcanza

ni uno ni cien ni mil poemas escritos
pueden decir del hambre y de la panza
proeza que el humilde en su castigo
sabe en rigor lo que pone en la balanza

una rosa, una moneda, un dolor, una página blanca,
ellos siguen la estrella ciega que en la noche avanza
con ojos llenos de sonrisas y tantas, y tantas lágrimas
que saben nacer y perecer en la miseria que se les alza

símbolos de amores negados surcan los aires,
sociedades sin memoria que hacen de la historia
una parodia de un futuro incierto de ignorantes
que entierran el saber sin saber en un féretro de gloria

quien se anima a discutirle al gran señor sajón del norte
si desde el este hasta el oeste se alinean mil pirámides
y el hombre puede reconocerse en el cielo repetido en el orbe
el mayor sagrado rito del saber que se entrega en vorágines

dicen lo que saben pero no saben lo que dicen

violencia en las calles y en las plazas
es lo que el progreso sabe en su tardanza
poner al hombre frente al hombre en su labranza
para cosechar solo una pobre ración rancia

y somos tantos, como insectos: escarabajos, pululamos
y la basura nos rodea y nos amamos sobre la tierra
que cada día se desgasta más y más: excomulgados
y sin embargo nos amamos sin preguntarnos siquiera

como vamos a salir de acá si no sabemos nada de nada
si el tiempo se nos consume en millones de granos de arena
y el hombre se desespera por desconocerse entonces se entrega
a la idea de consumir sin siquiera construir un solo habitat,

una razón espiritual, un rezo, una oración. Mil religiones
ocultan una gran verdad: nacer, morir, soñar. ¿Quien sabe
qué hay más allá (de esta cárcel)?, si pudiéramos levantar millones
de escalones podríamos llegar hasta nuestra propia e insignificante

imagen (identidad). Imaginemos un pájaro que vuela
y no tengamos más miedo que la vida es un sueño
y soñemos que mucho más luego solo nos queda
morir y volver a soñarnos en otro nuevo e idéntico sueño.

Si no sabemos soñemos con soñar lo que no sabemos (la reencarnación de los pobres)

FIN

viernes, 20 de mayo de 2011

La muerte siglos - gatoconbotas




Es la esencia que me lleva
a soñarme la muerte siglos,
es el cuerpo en la tierra
lo que me mantiene vivo.
el aire, sus ojos negros…son caminos,
su piel está allí: sincera
yo sin embargo cargo mi destino,
ella vive en otras letras
y yo al margen con mi propio sueño vivo.
¿qué más?, mi corazón me contesta
¿qué hacer si tanto me inquietan los designios?
¿si no puedo sostener siquiera
en ella uno de mis 5 sentidos?
si su boca no me deja
ni el más tímido suspiro…
Quiero verla de cerca
y soplarle un canto al oído
un viento suave que jamás se pierda
y que el eco me devuelva lo que digo
"que ella de vez en cuando me recuerda
y que también sueña conmigo".

miércoles, 18 de mayo de 2011

Mil veces - gatoconbotas


Te miro mil veces entre espejos
y veo tu belleza infinita
navegando en silencio
en la realidad escondida
de negros cóncavos
y verdes convexos.
No temas
es tan solo un efecto,
de espalda multiplicada
tan cerca
y de frente tan lejos.
Puedes llamarlo distancia
o simplemente tiempo,
imágenes como repetidas láminas
del sol en tu rostro y reflejos,
tu boca mil bocas
y tus ojos al acecho
tu boca mil bocas
y en tus ojos todos tus secretos,
aquellos que estaban
de los que amabas y no amabas
aquellos que son
y que cantando se fueron.
Yo que te comprendo
viniéndote como el agua
torrente de mis pensamientos
con hilos de plata dibujada
en valles, mares y vientos,
susurrándome mil veces
con muda voz de miradas
que eres mil pies que se marchan
y que tanto duele saberlo
que eres mil veces mi amada
y mil veces la mujer que no tengo.

sábado, 14 de mayo de 2011

Adiós - Hola (gatoconbotas)

(Dos versos de mis ausencias)

Adiós


Aunque nadie me lea

o nadie me vea, será

que vibran las cuerdas

a la luz del que quiera mirar.



Vacío, o solo membranas

ondulantes membranas

la vida no es tan complicada

y el tiempo simplemente pasará



voz como el azul oscuro,

labios que se cierran para siempre

sin palabras contra los muros

ni aromas, ni besos perennes;



entonces para qué lágrimas o alegrías,

el regreso, el adiós, la partida

si solo somos ciclos de noches y días

como sombras que eternas van



dando tumbos al nuevo rumbo,

un cuerpo, una cara alejada aún envía

una señal desde su mundo

una agónica soledad tan propia y tan mía,



un sueño casi compartido

el de habernos ido

a la tierra del olvido

y volver para decirnos


simplemente "adiós".


Hola


Hoy he puesto mi mirada a tu lado,

he vuelto una vez mas a la rosa

y al laberinto de tus pétalos intrincados.

Será que la lluvia me incomoda

y el simple recuerdo de verte reconforta,

siempre entre una vereda u otra

a mi mente llega el muro de tus labios.

Entonces digo “hola” con cierta forma de onda

y la palabra viaja de frente, surca perfil y de costado,

retumba y llega lentamente viva como aromas,

atrapa, desnuda, desea y espera un resultado

efímero entre los siglos, simplemente una coma,

un lapso entre dos mundos, un pequeño salto

para derrumbar secretos de cuerpos y formas

y sentirse cómodo entre dos extraños.

Una simple voz, luz, rendija entre tantas sombras,

silueta y verbo de mis largos años,

roza amor y vida el hola en la simple rosa

matiz el brillo se ilumina en tus ojos al escucharlo…

miércoles, 11 de mayo de 2011

El camino largo (gatoconbotas)

He partido una tarde
en calma
sin lágrimas ni pañuelos,
si parecía hasta una fiesta.
Cuando el amor se iba
y la vida me devolvía
al eterno duelo.
Solo con tiempo
supe escuchar la voz
aquella que llega
desde muy adentro.
“cuanto la quise,
cuanto aún la quiero”,
¿Aún la quiero?
me dije, me digo…
siempre me diré,
y es extraño extrañar,
bajo la gorra
tantos recuerdos,
allá quedaron los hijos,
la casa,
los santos martirios,
allá quedaron los sueños muertos.
Más allá del bien o del mal
sangran aún,
si, sangran aún
aquellos tibios
fríos besos
y este azulado río
me devuelve al mar
con su aire
de tristes vientos.
La soledad me sopla al pasar,
oleadas, remordimiento,
la huella gris
que pinta todos mis versos.

El camino largo
hiere,
se abre paso
entre poema y poema
parte al monte
que se erige horizonte
de sombras y fracasos,
y la congoja
de amaneceres pálidos.
El camino largo
hiere,
marca cicatrices
en el alma
con sus pasos.
Antes fue silueta,
ojos agazapados,
y sin embargo
fue casi dulce su presencia
y fue llanto
de ojos de miel y canela
en la ausencia
de su regazo.
Esperanza en cada piedra,
esperanza en cada tramo,
esperanza, esperanza...
sueño trunco en la distancia:
recuperar lo jamás sembrado.

Si, el camino largo
hiere.

He visto morir una estrella,
se ha marchado su luz
y mi alma
ha quedado huérfana.
Divagan mis palabras,
balbucean,
sin sentido se vuelan
y se vuelven
como esas pequeñas
aves negras,
van y vienen,
se marchan,
desaparecen
por el mismo cielo
celeste y blanco
que tantas veces
las vio claudicar.
Le miento a mis ojos,
le muestro imágenes secretas,
espejismos rotos
de caras inciertas.
Espero al ángel bajar,
alguna vez,
jardines
alas que me la devuelvan.

La tristeza…
la tristeza me carcome la piel,
se impregna en cada poro,
y pienso en aquellas
pequeñas rubias cabelleras,
y entre tanta gente
me absorbo,
me siento solo,
evoco,
me derrumbo
ante tantos errores del pasado
y se que a veces
tuve a ese tan ansiado ángel
sentado en mí mesa.
Si, lo tuve.
No supe abrazarlo,
retenerlo o liberarlo
para la redención
de mis pecados
o para la liberación
de mis recuerdos malos.

El camino largo
hiere...
He partido una tarde
en calma
sin lágrimas ni pañuelos,
entre el empedrado
y el musgo del tiempo,
olvidado,
las historias se disuelven,
miles de pisadas
y solo,
solo una huella.
Se apagó el amor,
se fue su luz,
se murió mi última estrella.

”El destino es horizonte
y nuestras vidas fueron
siempre eternas paralelas.”