Sigo una nube que se vuela,
se va de esta vida mía,
lejos, muy lejos...tan alta se lleva
parte de mi tiempo y parte de mi fantasía.
Nunca supe su nombre,
me guiaba el viento norte del instinto
a veces por caminos de cuando hombre,
a veces por caminos de cuando niño.
Me falto ese saber de la vida
y la busco entre mis propios escombros
entre mil canciones idas
subidas a la cornisa de mis hombros.
Miro mis manos escribiendo nada
busco entre mis dedos toda esa nada
y me descubro solo tan solo,
escribiéndolo, solo escribiéndolo.
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